En el Año Sacerdotal el Levante UD homenajeó a Vicente Esteve en presencia de mons. D. Carlos Osoro, arzobispo de Valencia

 Desde El Cañamelar y El Rosario, J. A. Crespo

Los levantinistas tenemos que estar a la fuerza contentos y satistechos del rumbo que ha cogido este Levante desde que Quico Catalán está al frente de él. Ha esperado pacientemente pero ha valido la pena. El Levante, el miércoles 10, fue recibido en audiencia por el sr. arzobispo, mons. D. Carlos Osoro.

Primero y como es tradicional en Palacio Arzobispal siempre que son las 12 del mediodía, se rezó la oración mariana del Ángelus y después, el arzobispo regaló a cada uno de los que componían la comitiva un Rosario, Los Evangelios del año 2010, una medalla del V Encuentro Mundial de las Familias y la nueva revista 'Catedral de Valencia'. El Levante por su parte, obsequió al prelado con una camiseta alusiva al centenario del club granota con su nombre impreso y una réplica del trofeo que se ha creado para perpetuar esta efemérides.

Quico Catalán no desaprovechó la presencia en el acto de Vicente Esteve, capellán del club, que acudió a Palacio Arzobispal en silla de ruedas, para homenajearle, precisamente en el año en que toda la Iglesia celebra el Año Sacerdotal por aquello de conmemorarse el 150 aniversario del nacimiento de Juan María Vianney, patrono de todos los sacerdotes. Fue un gesto sencillo y emotivo, no exento de sinceridad y que viene a demostrar el nuevo talante de este nuevo Levante que bajo la 'batuta' de Quico Catalán parece que está poniendo las bases para que cada vez 'suene' mejor.

La Hermandad del Cristo de los Afligidos al publicitar dicho homenaje quiere adherirse, de alguna forma, al centenario del club más antiguo de Valencia: el Levante UD. y desea hacerse eco del homenaje a Vicente Esteve porque desde 1993 - hace ya la friolera de 17 años- es 'cañameler d'honor', título por el que se le vincula de por vida al Cañamelar y al Rosario.

Ha hecho bien el Levante en homenajear a su capallén que atraviesa desde hace unos años un delicado momento de salud y en su día, la Hermandad del Cristo de los Afligidos acertó de pleno al nominar a Vicente Esteve como 'cañameler d'honor' su más alta distinción. Vaya pues lo uno por lo otro.